Sobre la receta
Si alguna vez te has preguntado qué hacer con las sobras de una tabla de quesos, esta pasta es la solución perfecta. Llevo años preparándola y nunca falla. Es fácil, deliciosa y se adapta a lo que tengas en casa. El truco está en comenzar con salami, agregar tomate para la base de la salsa, incluir algo marinado como aceitunas o alcachofas y, por supuesto, terminar con un buen queso derretido.
Perfecta para disfrutar en Semana Santa o cualquier día en el que quieras algo reconfortante y lleno de sabor.

Ingredientes
Ingredientes
250 g de pasta (puede ser penne, fusilli o la que prefieras)
100 g de salami (en trozos o rebanadas)
1 tomate (picado o triturado)
1/2 taza de aceitunas o alcachofas marinadas
Sobras de quesos variados (gouda, cheddar, parmesano, brie, lo que tengas)
1 cucharada de aceite de oliva o mantequilla
Sal y pimienta al gusto
Preparación
Pasos de la preparación
Cocinar la pasta
Hierve la pasta en agua con sal hasta que esté al dente.
Reserva un poco del agua de cocción para la salsa.
Preparar la base de la salsa
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva o mantequilla.
Sofríe el salami hasta que esté dorado y suelte su sabor.
Agrega el tomate picado y cocina hasta que se deshaga y forme una base espesa.
Incorporar los ingredientes marinados
Añade las aceitunas o alcachofas a la sartén y mezcla bien.
Agregar la pasta y los quesos
Incorpora la pasta cocida y un poco del agua de cocción para ligar la salsa.
Agrega los quesos rallados o troceados y mezcla hasta que se derritan y la salsa quede cremosa.
Ajusta la sal y pimienta al gusto.
Servir y disfrutar
Sirve caliente y disfruta de esta pasta llena de sabor y aprovechando las sobras de quesos.
Tip extra:
Si quieres un toque más gourmet, agrega un poco de albahaca fresca o un chorrito de vino blanco al cocinar el tomate.